terça-feira, 17 de novembro de 2009

La cronicidad de la guerra

Por Gregorio Baremblitt

Quando examinamos el panorama planetario en lo que a la existencia de guerras se refiere, nos invade una muy especial desesperación. Corremos, entre otros peligros, quizá el más grave de toEntretanto la América Latina, que ya hacia un siglo que no presentaba conflictos bélicos internacionales, deja ver una cierta " preparación para la guerra" que desespera a los espíritus atentos.
Cuando una guerra mundial se suspende, conflictos regionales, internacionales, regionales, étnicos etc la suceden. A menudo los mismos no han terminado nunca, y otros son nuevos e inesperados. Ese novedoso panorama remanscente insinúa nuevos alineamientos que prarecen una nueva conflagración mundial. En fin, es un tormento que jamás se termina.
Que hacer? Como decía el injusticiado lider comunista Lenin.
Sacar de la vida lo que se puede para divertirse e ignorar lo que puede pasar en los lugares en que no pasa (por ahora?).
O dedicar buena parte de la vida a hacer todo lo que se pueda para que pase menos, o no vuelva a pasar?
No hay ningún ser humano tan estúpido como para no entender que se trata de una alternativa sin medias tintas.dos, consistente en pontificar que la guerra, que como ha dicho un célebre pensador "Es el acontecimiento mas grandioso y más estúpido prodúcido por la humanidad", o "Es un componente esencial de la " naturleza humana". Tal pensamiento es, a su vez, uno de los más célebres y estúpidos producidos por la mente humana.
No obstante, la impresión que produce la lectura de la historia, sea qual sea la inclinación del historiador, es que las guerras, o la inminencia de la mismas, nunca acaba de estar presente como un espada pendiente sobre nuestras cabezas.... y cuerpos, seres queridos, pertenencias etc.
Los EEUU, después de una de las más sangrientas guerras de anexación de territorios y de unificación interna forzada, ha logrado constituir en bloque sin guerras internas (no puede decirse lo mismo de las externas)
La Comunidad Europea, con otros recursos que no dejan de incluir las guerras de integración, parecen haber instituído un bloque jamás obtenido antes en la cruenta historia de Europa. Lo mismo vale para ciertos países independientes como Canadá, Australia etc.
Ya el sector asiático el de la ex Unión Soviética, el africano y el de Medio Oriente son una constante amenaza para la paz mundial.

Um comentário:

Tania Montandon disse...

La paz mundial será siempre una utopia aún menos viable que el comunismo de Marx y Engels?